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sábado, 12 de agosto de 2017

* VUELVEN LOS BRAVOS MAS BRAVOS QUE NUNCA

El sinaloense Walter Silva terminó en la posición 11 entre los lanzadores con mejor efectividad en la LMB con un diminuto 3.07 de efectividad en 21 aperturas, en las cuales sumó 117.1 innings trabajados con dos juegos completos.

En este 2017 no enfrentó a los Rojos del Águila. La última ocasión que lanzó ante ellos fue el 14 de julio de 2016 cuando vestía la franela de los Toros de Tijuana y salió con la derrota en el Estadio Gasmart.

Su última apertura ante los Rojos del Águila en el Estadio Beto Ávila fue el 16 de abril de 2016 con los Toros y no tuvo decisión al trabajar 5 innings con una carrera y seis imparables.
Del 2005 a la fecha, Walter Silva tiene una marca de 2-4 con 4.76 de efectividad en siete aperturas ante los Rojos del Águila de Veracruz.

Será el primer juego de playoff de los Bravos desde el 13 de agosto de 1991 cuando visitaron el desaparecido Parque del Seguro Social para enfrentar a Diablos Rojos del México.

La novena leonesa es la primera que accede a la postemporada en su campaña de reaparición, desde que en el 2012 lo hicieran los Rieleros de Aguascalientes.

Tres fueron las ocasiones en la temporada que se enfrentaron Bravos y Rojos del Águila. De un total de nueve encuentros, los Bravos salieron con el brazo en alto en cinco a cambio de cuatro derrotas.

José Miguel Piña le lanzó este año una vez a los Bravos y salió sin decisión el 9 de mayo al permitir dos carreras y cinco imparables en 6.1 innings de labor, en juego disputado en el puerto.

Haciendo un poco de historia en relacion a esta franquicia, el primer equipo profesional de León que participó en la Liga Mexicana de Beisbol (LMB) se llamó Cachorros, y fue una franquicia que llegó a la ciudad para la temporada 1979 proveniente de Tampico (Alijadores) y sólo se mantuvo un año más.

Para 1983 la franquicia volvió, pero ahora con el nombre de Bravos de León culminando la temporada con una marca de 55-61, ubicándose en la sexta posición de la División Noroeste de la LMB siendo el manager Benjamín “Papelero” Valenzuela.

En 1986, el manager-jugador, Jack Pierce, dispara 54 cuadrangulares para romper el añejo récord de jonrones en una temporada que le pertenecía al mítico Héctor Espino con 46.

Para 1987, al mando de Obed Plascencia, se da la primera temporada ganadora para los Bravos de León quienes terminan con marca de 65-56 calificando por primera ocasión a los Playoffs como cuarto sitio de la Zona Sur y siendo eliminados por barrida ante los Diablos Rojos del México en la primera ronda.

Para 1989, y después de venir de otra campaña ganadora en 1988, llega como manager Francisco “Paquín” Estrada, quien logró llevar a los Bravos a lo que es hasta ahora la mejor temporada de su historia tras culminar el calendario con récord de 73-57 y calificar a la postemporada como segundo lugar de la Zona Sur, aunque fueron eliminados en seis juegos en la primera ronda por los Leones de Yucatán.

La campaña de 1989 había ya anunciado que algo bueno vendría para los Bravos, y en 1990 se logró lo que hasta el momento es el único campeonato para la franquicia en la LMB.

Con “Paquín” Estrada de manager, los Bravos terminan con marca de 74 ganados y 57 derrotas para ubicarse en el tercer puesto de la Zona Sur.

En la primera ronda de Playoffs barren a los Diablos Rojos del México para acceder a la final de la Zona y enfrentar así a los Piratas de Campeche.

Ante los Piratas, los Bravos se vieron sólidos y salieron adelante con la serie ganada 4-2 para entonces enfrentar en la final de LMB a los Algodoneros de Unión Laguna, equipo al que finalmente derrotaron cuatro juegos a uno con tremendas actuaciones en la loma de Julio Purata y Jaime Orozco.

Aunque en 1991 los Bravos tuvieron una muy buena temporada con marca de 73-45 y accedieron hasta la final de la Zona Sur, donde fueron derrotados 4-3 por los Diablos Rojos del México, terminando la campaña partirían para tener cobijo en Minatitlán.

Después de 25 de ausencia, el beisbol profesional de la LMB regresa a León más recargado que nunca y con unos Bravos que prometen dar espectáculo tanto en el campo como en la tribuna.

Así, con las pilas totalmente renovadas y con una directiva joven que tiene el interés de que el beisbol se quede de por vida en la ciudad, los Bravos regresan al circuito veraniego con la firme idea de no solo permanecer, sino trascender en la historia del beisbol mexicano.

Es uno de los 117 peloteros nacidos en México que han jugado en Grandes Ligas, Luis Carlos Rivera debutó en el mejor beisbol del mundo el 4 de abril del 2000 con la franela de los Bravos de Atlanta.

En este momento es el manager más joven de la Liga Mexicana de Beisbol en lo que es su temporada de debut.

ESTADIO DOMINGO SANTANA:
Inauguración: 2 de septiembre de 1973.
Dimensiones: 330 pies por el jardín derecho, 400 pies por el central y 330 por el jardín izquierdo.
Capacidad: 6,500 aficionados.

REDES SOCIALES:
www.bravosdeleon.com
Facebook: Bravos de León
Twitter: @NacimosBravos
Instagram: Bravosdeleon
Snapchat: Bravosdeleon.

RÉCORDS INDIVIDUALES DE BRAVOS DE LEÓN EN LMB:
Novato del Año (1): David Sinohui (1990, pitcher).
Campeón de cuadrangulares (4): Iván Murrell y Luis Alcaraz (1979 con 24); Iván Murrel (1980 con 32) y Jack Pierce (1986 con 54, *récord vigente en la LMB).
Campeón de bateo (1): Willie Aikens (1989, .395 de porcentaje).
Juegos sin hit ni carrera lanzados (2): Álvaro Soto (21 de julio de 1983 ante Sultanes de Monterrey con pizarra de 5-0 jugando en la Sultana del Norte); Israel Velázquez (4 julio de 1990 ante Tigres de México con score de 5-0 jugando en la Ciudad de México).
Juego ganado y salvamento en un mismo día: Héctor Manuel Díaz (30 junio de 1979 contra Poza Rica); Ismael Granillo (28 de junio de 1987 contra Yucatán).
Más wild pitchs cometidos en un juego de siete entradas: Carlos Ibarra (5 el 19 de abril 1983 contra Coatzacoalcos).
Pelotero más veces cambiando de equipo en una temporada y estando involucrado Bravos de León: Florentino Duarte (1986, León, Rojos del Águila, Diablos y Saltillo).
Más asistencias realizadas en un juego de nueve entradas: Jack Pierce (5 el 14 de marzo 1987 contra Tecolotes de los Dos Laredos).
Más asistencias realizadas en una temporada: Juan Francisco Rodríguez (453 en 1987).
Más errores cometidos en un juego de 9 entradas: Juan Francisco Rodríguez (4 el 23 de mayo de 1984 contra Monclova) y Celerino Sánchez (4 el 5 de marzo de 1979 ante Nuevo Laredo).
Más triple plays realizados en todos los tiempos: Ricardo Herrera (4).
Dos salvamentos en un día: Gerardo Sánchez (1).
#BeisbolCampechano⚾🏆
#ReyDeLosDeportes⚾

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